Esta vez sólo me dirijo a
aquellos a los que quiero mandarles un beso.
Un beso a vos, que me dijiste que
te ibas con el amor de tu vida y eso
duró menos que la manteca en el hocico del perro.
A vos que me controlabas tanto;
porque “el ladrón considera a todos de su condición”.
A vos que lo último que me
dijiste fue No sé, y me convertí en un mar de preguntas que me hicieron
perderme.
A vos, que me despediste viéndome
llorar y no hiciste nada, hasta diez! Años después.
A vos, persona incapacitada
emocionalmente. Que se llevó parte de mi alma y mi sonrisa por mucho tiempo
para teñirla de colorado.
A vos, que con la excusa de la “colgadez”
medías todos y cada uno de tus actos, casi con maldad.
A vos, que un día desapareciste,
y te escondiste, aun siendo un gigante.
A vos, que te lastimé, te ilusioné
y terminé detestando hasta las mejores intenciones.
A vos, que no tenías otro plan que vivir de mis
planes.
A vos, que me veías parte de tui
vida, cuando ya cada vez me veía más parte de la mía. Sola.
Un beso también a vos! Que me
hiciste responsable de los fracasos de todos, y tenías tanta o más
responsabilidad que yo.
A vos, que me dijiste clarito: De
mí no te enamores.
A vos. Sí sí a vos; que me dijiste de mí sí enamorate. Me
regalaste un cornamento; un tibio perdón y un buena suerte y hasta luego.
A vos, que todavía intentas que
te crea las mentiras y justifique tus ausencias.
A vos y a tu novia, a la que le
debe encantar que me digas que están en supuesta crisis.
Un beso enorme a vos; que te usé para salir del infierno.
A vos, que me escribís a las 6
am, por si el after party llegara a
estar abierto.
A vos, que me
debes abrazos, y charlas y vino, para el día que te divorcies.
A vos, que me
diste el recuerdo del mar más hermoso que tengo.
Y no puedo no enviarte un beso a
vos, que te observo siempre esperando que un día notes mi presencia.
Un vaso de agua, y un beso no se
le niegan a nadie.