lunes, 21 de mayo de 2018

Reíte

Reíte. Todo lo que puedas. Reite Cuando puedas que tu risa es fatal. Reíte tanto que se te achinen los ojos. Tanto que sea el motivo por el que llores o por el que justamente pares de llorar. 

Reíte con ganas. Fuerte y con desparpajo. Reíte cada vez que creas que hay más motivos para parar.
Reíte siempre y como si fuera la última vez. Como si nadie te estuviera viendo, como si nadie lo estuviera esperando. Como si a todos estuvieras modificando.
Reíte mostrando todos los dientes. Que el sonido sea contagioso. Con todo el cuerpo. Que sea sincero; que pueda ser más que una mueca...que sea real. 
Reíte y que por un momento sea lo único que importe. Aunque haya mil cosas que creas que te importan más.  
Reíte. Que la risa salva. Reíte todo lo que puedas, cuando puedas. Porque es verdad que a veces no vas a poder igual. 
Entonces, ante la duda, reíte. Y cuando no se pueda, que sea un estadía esperando que esa música volverá.
Reíte... que lo que no se va en suspiros en lágrimas se irá. 
Reíte y pensá:  que si te vas a morir... que sea de risa es lo mejor que te puede pasar.